viernes, 17 de abril de 2015

4º LOS ISTJ SEGÚN MI EXPERIENCIA

El tipo a describir hoy es el ISTJ. El significado de sus siglas es Introverted, Sensing, Thinking, Judging. Como vemos, tan solo hay una variación en la última letra con respecto al último tipo aquí descrito. Lo que resalta su preferencia por la planificación y el control de su entorno.

Las personas de este tipo no tienen una disposición natural hacia la gente desconocida, como en general suele ocurrir a los introvertidos. Sin embargo, estas personas se mantienen especialmente alerta con las personas nuevas, aunque también con los que ya conocen. El matiz está en que de las personas que ya conocen, van descubriendo cosas nuevas, las cuales aceptan sin más sean éstas buenas o malas. De las personas nuevas se mantienen alerta por lo peligroso que les pueda parecer. Se fían bastante de su instinto para confiar o desconfiar de la gente de su alrededor, aunque se mantienen claramente en la zona de desconfianza hasta que no haya confianza, quizá hasta quieran dejarte claro aún no sois amigos.


Una vez te considere amistosamente, puede que se comporte con una enorme y aparente espontaneidad y gran energía. Sin embargo, la espontaneidad no es tan descontrolada como parece. No se les escapará una palabra de más ni dirán nada que no deban, difícilmente perderán absolutamente el control.

También saben muy bien cuál es el alcance de cada una de sus amistades en todo momento.

Es difícil que sean los creadores de algún problema y tener disputas con ellos. Esto es porque si conocen a la persona en cuestión, pueden adaptarse a sus arrebatos, impulsos, incoherencias, sin romper la relación amistosa. No idealizan a nadie ni se engañan. Aunque igualmente difícil es no tener un problema con ellos al sobre-interpretar sus actos a la manera común (cosa que también puede ocurrir con los ENFP, y con más frecuencia).


Pueden actuar de una manera sorprendente por motivaciones muy distintas a las que cualquiera se pueda imaginar. Esto obliga a la otra persona a des-enfadarse con frecuencia, que es difícil de conseguir en alguien. También son bastante sinceros respecto a lo que piensan, incluso si pueden llegar a ofender. No son particularmente ambiciosos.


Al tener un problema con una persona que estiman mucho, lo pasarán, de manera silenciosa y probablemente sin que la otra persona se entere, bastante mal y puede que durante bastante tiempo. Sufren por los demás incluso sin ser ellos culpables y sin tener particulares deseos de ira hacia la otra persona.

Son bastante cándidos con la información, pues pueden no llegar a concebir la deshonestidad. Esto les lleva a preguntarse: «¿y por qué iba a querer mentirme?». Cuando la información está dedicada a su enseñanza saben reconocer a quién es bueno para impartirla, y no se fiarán de quien no lo sea. No dan un solo rodeo si quieren decir algo, no harán cosas complicadas cuando pueden hacerlas de manera simple, incluso acortarán los nombres de algunas de las personas con que mantengán un prolongado contacto si este nombre resulta ser trisílabo. Los problemas únicamente vienen cuando su esfuerzo comunicativo por aclarar malentendidos es excesivamente bajo. 

Valoran la inteligencia y el conocimiento en las personas, aunque pueden no invertir demasiado tiempo en conseguirlo ellos mismos, pues no son amigos de grandes abstracciones, prefieren lo simple pero significativo. Difícilmente afirmarán nada de lo que no estén totalmente seguros. Organizan mucho su día, que con frecuencia suele acabar en rutina con pocos eventos que la saquen de su cauce. Su principal característica de cara a los demás es la confiabilidad, una vez se haya acordado lo que se hará, no faltarán en hacerlo, y siempre estarán dispuestos cooperar si otros cooperan con ellos. Sin embargo lo que más me llama la atención a mí, particularmente de este tipo, es la capacidad de autocontrol interno, de cada expresión facial y gestual, y lo que cada una ellas transmite, el dominio y capacidad de influencia solo mediante el lenguaje corporal.

Difícilmente se verá a personas de este tipo enzarzados en disputas ya que aquel lenguaje corporal es bastante disuasorio, difícil es verles gritando por motivo de un enfado y menos aun discutiendo acaloradamente por un tema sin trascendencia alguna. No suponen ni una sola de las palabras que se les diga, todo lo que les queda en la cabeza, es todo lo que se les ha dicho, literalmente.

Es muy posible que recuerden casi cada uno de los días acaecidos en sus vidas, a partir, evidentemente, de cierta edad en la infancia. Recuerdan esto con una viveza y actualidad sin parangón entre los tipos, y esto deja imperturbable e intacto al paso del tiempo tanto la amistad como el rencor. Pueden llegar a ser muy intransigentes consigo mismos si fracasan.

Tienen una clara idea de lo que es el buen gusto, y no tendrán duda alguna de lo que lo es y de lo que no es de buen gusto (estéticamente hablando). No son amigos de lo especialmente llamativo, y pueden reconocer lo que queda bien aunque no sea aplicado a ellos. De hecho es muy posible que el repertorio de lo que estén dispuestos a ponerse sea inferior al que puedan considerar de buen gusto, según quien se lo ponga, claro está. Suelen ser muy bien parecidos físicamente, combinación quizá entre su claridad para los gustos y el cuidado no demasiado exhaustivo de su popio cuerpo.

No son amigos de las alturas, balanceos, ni de nada vertiginoso, sufren terriblemente en parques de atracciones y lugares semejantes. Es probable que tengan una especial aversión e incluso pánico a las arañas y otros insectos.

Las personas con este tipo pueden llegar a confundirse fácilmente con INTJ, aunque su parecido no es tanto en mi opinión:

Dwigth Eisenhower es uno de los que con frecuencia aparecen asociados a este tipo, y otras tantas veces a los INTJ. George Bush es un clásico de este tipo en todas partes.
El perfecto retrato de un ISTJ es el de Soichiro Yagami, para quien haya visto la serie de Death Note (muy recomendable por cierto).